Al igual que cada año la noche previa a nuestro viaje a EEUU es dificil....los nervios se apoderan de nosotros y nos cuesta conciliar el sueño, este año no iba a ser diferente, así que aún no había amanecido cuando ya estábamos levantados y dispuestos a vivir nuestra nueva aventura, no sin antes enfrentarnos a esos últimos momentos típicos llenos de nervios : cerrar maletas, revisar casa, comprobar que llevamos todos los documentos, pasaportes etc
Salimos pronto de casa y nos paramos en un restaurante que nos encanta llamado Tres Hermanas, donde disfrutamos de un extraordinario desayuno tico: gallo pinto, la verdad es que habiendo madrugado tanto ya era nuestro segundo desayuno y personalmente agradecí mucho esa parada.
El trayecto por las carreteras de Costa Rica rumbo a San Jose transcurrió entre conversaciones,risas y elucubraciones sobre lo que nos depararía esta vez la llegada a Estados Unidos, para nosotros es muy especial volver a estar en lugares en los que ya estuvimos en aquel primer viaje porque en esta ocasión no solo tendrá la magia que de por si tiene para nosotros este país si no porque ya hemos escrito parte de nuestra historia en ciudades como Los Angeles y San Francisco, ciudades que fueron el final de aquella maravillosa Ruta 66 y que no pudimos ver tan a fondo como nos hubiera gustado pero que guardan un valor sentimental especial porque llegamos allí recién casados, visitarlas de nuevo dos años después será muy especial sin lugar a dudas.
Acercándonos a San Jose tuvimos que dejar un poco de lado nuestras entretenidas conversaciones para centrarnos en el GPS y llegar al hotel que nos acogerá hasta las cuatro de la mañana, en esta ocasión hemos elegido el Courtyard Marriot San Jose Airport Alajuela http://www.marriott.com/hotels/hotel-photos/sjoap-courtyard-san-jose-airport-alajuela/ por su proximidad con el aeropuerto ya que tienen servicio de traslado hasta allí, algo que nos viene bien por lo intempestivo del horario ya que el avión sale a las siete de la mañana y tenemos que estar en el aeropuerto tres horas antes , así que nuestro plan inicial era acostarnos muy pronto para poder disfrutar de unas horas de sueño hasta las tres de la mañana aproximadamente.
Como imaginareis este plan no llegamos a cumplirlo a pesar del sueño acumulado la noche anterior ,nuestra emoción por el viaje y nuestra preocupación de quedarnos dormidos nos lo impedían, así que cenamos y tratamos de dormir con la tele como compañera y conseguimos conciliar un ligero sueño en algún momento.
Mientras esperábamos el transporte hice una foto al hotel y podréis ver una única ventana iluminada,la nuestra.
Mientras esperábamos el transporte hice una foto al hotel y podréis ver una única ventana iluminada,la nuestra.
A las cuatro en punto estábamos en el aeropuerto, todo fue como teníamos previsto y a las siete estábamos en el avión, un vuelo de Delta que no pudo comenzar mejor : estábamos sentados en los primeros asientos desde donde se veia la cabina del piloto, así que me levante esperando un NO rotundo, (máximo en un vuelo a Estados Unidos donde toman todo tipo de precauciones,) y pregunte si podía entrar para verlo, ante mi asombro (y el de Santiago que vio como desaparecía a traves de la puerta) el piloto y el copiloto fueron encantadores y hasta me ofrecieron hacerme una foto con ellos,incluso el piloto me coloco su gorra , me enseñaron los miles de botones que forman parte de la cabina y me desearon un muy feliz vuelo a lo cual yo respondí que eso solo dependía de ellos! así que cuando salí me encontré con la cara de asombro de Santiago y le enseñe todas las fotos mientras el avión despegaba, fue una bonita experiencia y recuerdo que conocer al piloto me hizo sentir mas seguridad en el vuelo.
La llegada a los Angeles transcurrió sin incidentes en la entrada al país, en esta ocasión no nos pusieron ningún inconveniente y tras las colas típicas para los pasaportes, maletas etc estábamos en la puerta tomando un taxi hacia nuestro hotel Luxe Hotel Rodeo Drive http://www.luxehotels.com/rodeodrive. A pesar del sueño y del cansancio, dejamos las maletas y en cinco minutos estábamos recorriendo la calle de Rodeo Drive, todas nuestras frases comenzaban por :¨ te acuerdas de este sitio ? y de este otro?¨ y proseguían con un :¨ mira aquí estuvimos, aquí nos hicimos una foto....¨, en fin...pareciamos dos niños recordando el ultimo día de los Reyes Magos, volvimos al famoso hotel de Pretty Woman : Beverly Willshire http://www.fourseasons.com/beverlywilshire/ donde volvimos a ver sus maravillosas tiendas y sus lujosos coches aparcados a la entrada, comimos en una preciosa terraza y continuamos nuestro paseo hasta la noche momento en el que tomamos una cena ligera en nuestro hotel y nos fuimos a descansar ya víctimas del cansancio, mañana será otro día! Estais invitados a pasarlo con nosotros!!
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